La Patagonia incontra la Capriasca
La Patagonia incontra la Capriasca: Il Circulo suizò de Punta Arenas a Tesserete per ritrovare le radici dei Lepori
Eduardo Lepori, 65 anni, Presidente del Circulo suizò de Punta Arenas (Patagonia cilena) e il figlio Luis, 35 anni, sono stati ricevuti il 18 ottobre 2012 dal Municipio di Capriasca.
Padre e figlio hanno soggiornato alcuni giorni a Tesserete, terra natìa del bisnonno di Eduardo, Felice Lepori, partito alla volta del Nuovo Mondo alla fine del Diciannovesimo secolo. Uno dei figli di Felice, Luigi, si è poi trasferito da Rio de Janeiro a Punta Arenas dove era stato chiamato, come stuccatore, a decorare il Palazzo Sara Braun, monumento storico della città.
Eduardo e Luis Lepori hanno trasmesso al sindaco di Capriasca Andrea Pellegrinelli, i saluti e una targa da parte del loro sindaco.
Per Eduardo, alla sua seconda volta in Capriasca, il viaggio fino a Sala dove nacque il bisnonno ha segnato il compimento di una promessa fatta al nonno Luigi che è morto senza rivedere la terra natìa. La comunità svizzera di Punta Arenas è oggi molto attiva e i discendenti dei coloni giunti oltre un secolo fa principalmente dal cantone Friborgo, sono quasi 2’000.
Sul numero 29 del periodico "Mosaico", redatto dagli allievi delle scuole medie di Tesserete, è stata pubblicata un intervista rilasciata recentemente da Eduardo Lepori. Per gentile concessione dei responsabili del "Mosaico", cliccando sul link sottostante potete leggere il testo.
Articolo Mosaico
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La amistad se puede desarrollar entre regiones muy lejanas, una del extremo sur del mundo, otra del centro de Europa como pasó en el octubre del 2012 con la visita en Tesserete, localidad situada en la Valle Capriasca del Tesino (zona de habla italiana del sur de Suiza a la frontera con Italia) del presidente del Circulo suizo de Punta Arenas Eduardo Lepori y de su hijo Luis.
En busca de sus raíces, los señores Lepori padre e hijo permanecieron algunos días en Tesserete. En el pueblo vecino de Sala Capriasca nació Felice Lepori el bisabuelo del quirurgo dentista de 65 años de edad Eduardo Lepori. Hasta el final del siglo diecinueve, el Tesino, hoy tercera plaza financiera de Suiza, era una región campesina muy pobre y no podía dar de comer a todos sus hijos. Entonces - como muchos otros tesinesos de esta época - Felice Lepori emigró a Sur de América con sus dos hijos. La primera destinación de los emigrantes de Sala Capriasca fue Rio de Janeiro en Brasil donde el bisabuelo Felice murió. Sus hijos cuyo uno, Luigi, era el abuelo de Eduardo Lepori se transfirieron a Santiago de Chile. Estucador de grande profesionalidad, Luigi Lepori fue llamado a Punta Arenas en Patagonia, a colaborar en la construcción del Palacio Sara Braun, hasta hoy uno de los edificios más prestigiosos de la ciudad antártica. En esta ciudad a la otra punta del mundo y a pesar de las dificultades del clima, Luigi Lepori fundió su familia.
Muchos años después, su nieto Eduardo cumplió una promesa hecha a su abuelo antes de su muerte, la de visitar al pueblo de Suiza italiana qué había dejado muy joven sin nunca poder volver.
Fue así qué el día 18 de octubre del año pasado el bisnieto y el tresnieto de Felice fueron recibidos oficialmente en el ayuntamiento de Capriasca por el alcalde, don Andrea Pellegrinelli y el responsable de la cultura Fiorenzo Ardìa. A su segunda visita en la tierra de sus antepasados, Eduardo Lepori ha regalado al alcalde de Capriasca un homenaje del alcalde de Punta Arenas.
El presidente del círculo suizo de Punta Arenas y su hijo han aprovechado de su estancia para visitar la región, favorecidos por un tiempo veraniego.
La comunidad suiza de Punta Arenas, a pesar de vivir desde generaciones en Patagonia sigue muy activa y fiera de su origen. Cuenta con circa 2000 miembros, por la mayoría descendientes de colones emigrados de Friburgo en Suiza francesa. En el último número del periódico Mosaico publicado por la Escuela secundaria de Tesserete, se puede leer una interesantísima entrevista hecha a Eduardo Lepori por los alumnos del colegio y descubrir así la increíble historia de los Lepori de Sala Capriasca.
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